12 de abril 2022
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En la víspera del cuarto aniversario de la Rebelión de Abril, el régimen de Daniel Ortega desató una nueva cacería contra la ciudadanía y la disidencia en Nicaragua. Este 12 de abril, la Policía Nacional ejecutó en Masaya dos allanamientos buscando a supuestos “organizadores” de actividades conmemorativas por el cuarto aniversario de la lucha cívica que estalló en abril de 2018.
La vivienda de María Andrea José, madre de Darwin Potosme -asesinado por la represión orteguista en junio de 2018- e integrante de la Asociación de Madres de Abril (AMA), fue allanada y rodeada por más de una docena de oficiales de la Policía.
“Pedimos la orden de allanamiento y no la tenían. Nos dijeron que los dejáramos entrar, que si no nos iba a ir peor”, denunció uno de los familiares de María Andrea en entrevista con CONFIDENCIAL.
El grupo de oficiales de la Policía, a bordo de cinco patrullas y siete motocicletas, llegó cerca de las 9:00 a. m. a la vivienda de María Andrea José, aduciendo que buscaban “propaganda política”.
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“Nos dijeron: `vamos a revisar la casa porque recibimos una denuncia. Ustedes tienen aquí propaganda política. Están organizando una misa en la Iglesia San Miguel´”, relató.
Explicó que como familia les dijeron que revisaran “todo lo que quieran, porque no tenemos nada”. Los policías por más de una hora "revolvieron todo" dentro de la vivienda, incluso revisaron celulares de dos de las siete personas que estaban en el lugar.
“Hizo unas llamadas y dijo: ´aquí no hay nada´, y se retiraron”, indicó el familiar.
Denunció que, previo a irse, los agentes fotografiaron a todos los que estaban en la vivienda, incluso a un menor de edad, y los amenazaron diciéndoles que si los miraban en la misa, que supuestamente se está organizando en la Iglesia San Miguel Arcángel, los “levantaban y se los llevaban presos, donde están los otros tranqueros”.
Madre de la víctima Darwin Potosme afectada por allanamiento
María Andrea José, de 64 años, se desmayó cuando la Policía ejecutaba el allanamiento en su vivienda. Según sus parientes, la mujer se vio afectada por el temor que tiene de que “se le lleven a otro de sus hijos”.
“Nos han quitado todo, hasta un miembro de la familia, y no nos dejan en paz. Este allanamiento nos recordó al momento en que supimos del asesinato de Darwin, cuando varios de nuestros familiares se descompensaron al saber la noticia”, indicó un pariente de María Andrea.
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) denunció el “abuso policial” contra la familia Potosme y recordó “al régimen que es derecho de los nicaragüenses conmemorar a sus familiares muertos”.
Además, exigió el “cese la represión y les respeten la integridad física y psicológica” de los familiares de las víctimas asesinadas en el contexto de las protestas sociales, iniciadas en abril de 2018.
Policía allana en busca de “papeletas”
La vivienda de Yolanda González, perseguida en Masaya luego de participar de las protestas de 2018, también fue allanada este martes por más de una docena de oficiales de la Policía, que “buscaban papeletas” que supuestamente serían “utilizadas en una misa en la Iglesia San Miguel Arcángel de Masaya”.
El allanamiento inició a eso de las 8:30 a. m. y culminó a las 10:00 a. m. En esas más de dos horas, la Policía revisó y revolvió todo dentro de la vivienda, pero no encontró las supuestas papeletas.
🔴Condenamos allanamiento policial arbitrario en casa de la opositora Yolanda González, al menos 15 policías llegaron a su propiedad a las 8:30 a.m. y entraron con violencia, sin importarles la presencia de 4 niños que lloraban con nerviosismo y miedo. pic.twitter.com/NxxBEW7ihH
— Cenidh (@cenidh) April 12, 2022
En los últimos cuatro años González ha tenido tres allanamientos. El primero ocurrió en octubre de 2020, cuando fue relacionada con supuesta portación ilegal de armas, tras la detención del exconcejal sandinista Benjamín Gutiérrez Collado. Tres meses más tarde, el 15 de enero de 2021, la vivienda nuevamente fue allanada y ella fue retenida durante cuatro horas por la Policía de Masaya, señalada otra vez de supuestamente portar armas de forma ilegal.
En este tercer allanamiento, la Policía no presentó orden judicial y no se llevó ningún bien de la vivienda, como ocurrió en los anteriores allanamientos, en los que sustrajeron dinero y enseres de la propiedad. Sin embargo, amenazaron con un nuevo encarcelamiento y criminalización contra Gutiérrez, en caso que ella asista a la misa que supuestamente se está convocando en la Iglesia San Miguel Arcángel.
