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"Maltrato y corrupción en la Policía Nacional"

"Quieren volver a hacer una policía sandinista" en la que solo "estamos por el presidente"

Desde que el comandante Ortega ejerce el poder controla la Jefatura de la Policía, según analistas. Carlos Herrera/Confidencial

4 de julio 2016

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Bajo la condición de no divulgar su verdadero nombre, “Walter”, exoficial de la Policía Nacional, brindó una entrevista a Confidencial en la que revela cómo ha sido afectada esta institución por el proceso de partidización impuesto por el presidente Daniel Ortega en los últimos nueve años. El resultado de este debilitamiento institucional en las unidades y distritos de la policía, según explica, es un ambiente de maltrato, corrupción, e impunidad, en la que los jefes tratan a sus subordinados como ¨mandaderos¨.

¨Walter¨ sirvió a la Policía Nacional durante once años. Trabajó en el área de vigilancia, patrullaje, seguridad pública, fue jefe de sector, estuvo en Auxilio Judicial y en Tránsito, y asegura que ¨los oficiales que cobran coimas son dirigidos por sus jefes¨.


Tomó la decisión de renunciar a la institución por el maltrato que recibía de parte de sus superiores. Al hablar con este medio de comunicación, admite que tiene ¨miedo¨, pero espera que valga la pena para ¨defender los derechos de muchos policías que no pueden hablar¨.

¿A nivel general, cómo valora el trato de los superiores hacia los subalternos en la Policía? ¿Existe conformidad, o hay algún tipo de reclamos?

Existe inconformidad porque nunca estamos estables, porque ellos deciden. Siempre hay que hacer lo que ellos dicen y no escuchan lo que nosotros decimos. Las decisiones que se deben de tomar sobre los casos es lo que ellos dicen y no lo que debemos hacer. Si alguien llega a que nosotros le resolvamos, sí es conocido ese caso y ellos lo conocen, entonces nosotros tenemos que hacer lo que ellos dicen, cuando tal vez no es lo más adecuado.

¿Estamos hablando de casos en los que están involucradas personas del gobierno?

Así mismo puede ser.

¿Lo que está describiendo es un caso aislado, o se han dado situaciones similares en otros distritos policiales?

Se ha escuchado, pero no tanto como en el distrito donde yo estuve.

¿Qué pasa cuando la ciudadanía hace acusaciones a oficiales de Tránsito de cobrar coimas? ¿Qué ocurre a lo interno de la institución? ¿Se abre un proceso?¿ Se les llama la atención?

A veces sí se hace, otras veces no, porque los oficiales que cobran son dirigidos por los propios jefes del área donde ellos están. Les dicen, “cobrá tanto, para que me des la mitad y quedemos bien”, y así llevarle el caso a X persona que es investigada. Son los jefes que hacen que los subordinados busquen coimas.

¿Usted ha conocido cómo funciona la dinámica de cobrar coimas? Algunos policías alegan que lo hacen por los bajos salarios.

Muchos dicen el bajo salario, la Policía no es bien pagada, es muy mal pagada. Además  de esto, buscan otros recursos para poder sobrevivir. Ellos viven estresados, no hay un horario fijo. Cuando uno ingresa a la Policía te dicen que debés de ser siempre 24/7 para la institución, no importa si tenés familia o no.

¿Cuál era su salario como policía?

De 6 mil 700 córdobas.

¿Era suficiente para cubrir sus gastos y los de su familia?

No, porque ni una canasta básica podés comprar con el dinero que te pagan.

¿Los bajos salarios hacen vulnerables a los policías a la corrupción?

Sí, porque es muy bajo lo que te pagan. Y hay gente que te da 10 mil, 20 mil, porque le cerrés bien el caso. Entonces vos mirás la manera más fácil, ellos te dicen que es una ayuda, pero no lo es, es una corrupción la que hay en la Policía, porque todas las instituciones con corruptas.

¿Hay corrupción en la Policía Nacional?

¿Existen mecanismos para investigarlos y corregirlos?

No existe nada de eso, ellos solo te saben decir que van a investigar y procesar, pero no investigan a los que de verdad deben investigar, que son los jefes, ellos son los mayores corruptos.

¿Qué tipo de corrupción es la que realizan los mayores?

Si llega un nuevo jefe a un distrito, ellos buscan los negocios y lugares de los alrededores para hacer su visita cordial, para que luego le pasen un sobre dándole a ellos su dinero, o bien mandan a los subordinados a retirar su sobre. Y todos los viernes y fines de semanas para que ellos puedan trabajar bien y no les corrijan el horario de los negocios.

En su opinión, ¿cuáles son los actos de corrupción que se cometen con más frecuencia en la institución policial? De menor mayor escala…

De menor escala: los de vigilancia, que por cualquier cosa te piden (dinero) en los negocios. De mayor escala: los jefes que van a cobrar a las discotecas, a agencias aduaneras, que van a pedir dizque ayuda para actividades cuando nunca existe eso.

Durante el tiempo en que usted estuvo en Policía Nacional, le tocó vivir los dos períodos presidenciales del comandante Ortega. ¿Cómo ha cambiado la institución?

En este último año ha sido de mucho cansancio para la institución policial porque estamos para todo. Para toda actividad del gobierno, que hay que cubrir plan techo, actividades del presidente, caravanas del presidente. Ya no existe lo que es la Policía individual a lo que es el partido. Quieren volver a hacer una Policía Sandinista, del mismo gobierno, todo manejarlo siempre en el mismo entorno y que lo hecho siempre se mantenga en silencio, que nadie diga nada, que nadie opine nada, porque la frase que ellos solo saben usar es que “estamos por el Presidente”.

¿Cómo se posicionan los policías ante estos cambios de tipo político en la institución?

No tenemos derecho a opinar. Debemos de callar porque somos apolíticos, cuando no es así.

En general, ¿están de acuerdo con ese modelo vertical?

No, pero no podemos decir nada porque es un temor que tenemos, porque si hablamos mal nos corren y si hablamos bien nos mantenemos.

¿Existen bandos dentro de la institución policial?

Sí existen, pero no pueden opinar, no pueden decir “no voy a las actividades”, porque te obligan a asistir a las actividades del partido, a que escuches música del partido. Aunque vos no querrás escucharla, debés hacerlo. No podés ni hablar ni reclamar porque te dicen que sos liberal y te mandan a una comisión.

¿Cómo reaccionan los policías cuando la institución se ve involucrada en actos represivos o delictivos que quedan en la impunidad. Como la agresión y el robo a OcupaINSS o las denuncias de abusos en las cárceles de Nueva Guinea?

Que existe mucha injusticia y que no podemos hacer nada. Eso es lo único que podemos decir.

¿Hasta qué punto eso afecta a los oficiales de la policía?

Cuando uno se mete a la institución policial, piensa que va a servir, a dar respuesta, a dar satisfacción, pero cuando ya mirás ese tipo de casos, de los que usted está hablando, te sentís que no vale la pena ser policía. Porque no llegas a ser policía, sino que llegás a ser un mandadero más de la institución.

Uno de los casos más polémicos en los que la PN estuvo involucrada fue la masacre en Las Jagüitas ¿Cómo afecta la imagen de la institución desde adentro, cuando un policía mata portando su uniforme?

Afecta mucho porque ese policía que mató fue dirigido, no fue porque él quiso hacerlo. Cuando a vos te dicen “vas a tal lugar, hay que ir a tal lado, si se mueve tenés que disparar”, y eso es lo que hizo él (agentes), recibir órdenes y nosotros como policías nos sentimos mal, porque la población critica a los policías, no critica a la institución, no critica nombre, critica en general.

¿Sabe usted si los policías que masacraron a esta familia están detenidos en el sistema judicial?

Si

¿Qué es lo último que supo de ellos?

Que fueron a pagar su condena al sistema penitenciario y allá están ellos, pagando su condena injustamente, porque ellos fueron dirigidos. Se libraron muchos y los de menos jerarquías se quedaron y los de mayor salieron libres ¿Dónde está la institución para ayudarles a ellos, a la familia? ¿Se preocupó por alguno de los que están presos? Porque fueron policías, cometieron un error, somos humanos, cometemos errores todos, pero dónde está la ayuda a sus familiares. Algunos de esos policías dejaron niños tiernos, mujeres sin trabajo, mujeres que dependían de ellos.

¿En el caso del atentado contra el activista Carlos Bonilla, los vecinos capturaron a dos atacantes y los entregaron a la Policía. Pero después la Policía los desapareció. ¿Cómo se explica que la Policía oculte a los propios sospechosos, en vez de presentarlos y someterlos a juicio?

Todo eso es dirigido y solo recibir órdenes. Si a vos te dicen “tenés que liberarlos”, los vas a liberar, porque es una orden que te están dando. Si te dicen que no los vas a presentar, no los presentas y así vamos a quedar, porque somos todo el tiempo dirigidos por altos mandos que mandan y te dicen: “hay que hacer lo que tenés que hacer, no tenés que decir ni renegar, se hace lo que uno dice”.

¿Cómo afecta a un policía el hecho de estar realizando cosas indebidas?

Afecta demasiado, porque no es lo que vos querés hacer, es lo que te están obligando y uno se siente tan impotente al no poder ayudar, te sentís tan mal en el aspecto de que es una injusticia, porque sabés que está mal lo que están haciendo, porque si no, te corren. Y si dependés de la institución, y si no tenés otro recurso, y si no estudiaste, y si no te preparaste, no vas a tener nunca un trabajo porque no vas a servir. De la Policía te corren y te manchan tu récord, no vas a buscar un buen trabajo, solo vendiendo agua o lustrando zapatos. Pero en una empresa, con una carta que te de la institución  donde dicen que no sos apto o te dicen que sos corrupto, no lo creo.

¿Qué tipo de sanciones aplican los superiores a los agentes que no están de acuerdo con sus lineamientos?

Traslado. Te trasladan y te dicen que es porque no estás de acuerdo con lo que ellos dicen.

Algunos manifestaron que eran enviados al Hospital de Día de la Policía. ¿Por qué sienten que visitar esta clínica es como un castigo?

Cuando yo estaba en la clínica del hospital de día ahí nos preguntaban que qué nos pasaba, que habláramos, que dijéramos qué problemas teníamos, cuál era nuestra depresión. Pero el grupo de nosotros que estuvo, preferimos mejor no hablar porque de todas maneras ellos (los jefes) iban a llegar a investigar si nosotros hablábamos del maltrato que existe.

Muchos oficiales de policía se excusaron de hablar para este reportaje, aduciendo que existe una cláusula de confidencialidad en sus contratos y por temor a represalias.

Cuando firmas el contrato de la Policía, sí sale que vos no podés ni hablar ni expresarte mal de la institución porque debés brindarle honor, seguridad y servicio. No tenemos derecho a opinar ni a denunciar, ni derecho a la liquidación ni a tu tranquilidad, por temor a lo que vos vayas a hacer. Por eso muchos policías no denuncian, por el temor, por la venganza, porque existe venganza, si se dan cuenta te investigan y hasta te pueden perjudicar. Por lo menos, yo estoy aquí sentado y tengo temor, porque no sé si el día de mañana se den cuenta quiénes somos los que denunciamos.

¿Por qué accedió usted a hablar para Confidencial?

Porque tal vez así estoy defendiendo los derechos de muchos policías que no pueden hablar, porque sí existe mucho maltrato en la institución y tal vez así como estoy cubierto, no puedan decir o juzgarme de lo estoy haciendo. Muchos policías dirán “tiene valor este hombre que está aquí, tiene fuerza para poder hacerlo”, pero otros dirán qué hizo, pobre lo que le va a suceder.

¿Crees que esta entrevista pueda ayudar en algo a tus compañeros?

Espero que sí, que valga la pena el miedo que tengo aquí sentado.


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Maynor Salazar

Periodista. Investiga temas de medio ambiente, corrupción y derechos humanos. Premio a la Excelencia Periodística Pedro Joaquín Chamorro, Premio de Innovación Periodística Connectas, y finalista del premio IPYS en el 2018.

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