24 de octubre 2021
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Entre el jueves y el viernes de esta semana fueron vacunados contra la covid-19, 7139 nicaragüenses que viajaron a Honduras para ser inmunizados en los dos puestos de vacunación que habilitaron las autoridades de este país, en El Guasaule y El Espino, zonas fronterizas entre ambas naciones, informó el canal hondureño Metro TV.
La vacunación en este punto estaba ocurriendo desde hace varias semanas, según confirman a CONFIDENCIAL fuentes de Madriz y Nueva Segovia, dos departamentos que fueron fuertemente afectados por el rebrote de la covid-19 en septiembre pasado, y que ante el aumento de casos buscaron protección en el vecino país.
“Hemos coordinado con las autoridades superiores hacer una vacunación para los hermanos nicaragüenses, en vista que teníamos una alta demanda de pobladores de Nicaragua solicitando vacunación en los puntos que hemos estado vacunado en la región sanitaria de Choluteca”, refirió el jefe regional de Salud, José María Pachuca.
Sin embargo, la ola de viajeros se incrementó después que las autoridades nicaragüenses confirmaron que a los menores de 30 años se les aplicará la vacuna Sputnik Light, que todavía no está aprobada, para uso en emergencias, por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según informó el Gobierno de Ortega, la jornada de vacunación con este biológico iniciará este lunes en todos los puestos y centros de salud del país, en donde también se aplicarán las primeras dosis de las vacunas cubanas Abdala y Soberana 02, en los niños mayores de dos años y en los adolescentes.
Vacunan con Pfizer y Moderna
En Honduras, las autoridades de este país están inoculando a los adolescentes, de entre 12 a 17 años, con la vacuna Pfizer y a los mayores de 18 con la Moderna. Según la información publicada por medios locales, los puestos estarán habilitados hasta el próximo seis de noviembre.
“Muchas de las personas que nos encontramos aquí es por el temor a que nos vacunen con la vacuna cubana, entonces muchos vienen a tomar el riesgo para protegerse mejor en esta pandemia”, dijo uno de los jóvenes que ingresó a este país vecino a través de puntos ciegos.
Los nicaragüenses que han entrado a Honduras por puntos ciegos lo han hecho para evadir el pago de las pruebas PCR que piden para transitar entre ambas naciones. En Nicaragua estas tienen un costo de 150 dólares y en Honduras el monto ronda entre 30 y 50 dólares, lo que resulta elevado para los nicaragüenses. Asimismo, los nicaragüenses que quieran entrar regularmente a este país deben hacer un prechequeo siete días antes de su viaje.
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@leomoncada62Gracias hermanos hondureños por empatía 🤧 #nicaragua #honduras #vacunacovid19 #guasaule
Además de Honduras, los nicaragüenses pueden viajar a El Salvador y Panamá que ya abrieron las puertas al turismo de vacunas. Mientras, en Costa Rica, los migrantes mayores de 18 años, independientemente de su estatus migratorio y demostración de arraigo, están siendo vacunados.
Sputnik Light es más efectiva que la AstraZeneca y la Sinopharm
Para vacunar a la población más joven de Nicaragua, que esperó durante meses su oportunidad, el Gobierno de Daniel Ortega compró más de tres millones de dosis de Sputnik Light, que vendrán este fin de semana, según anunció Rosario Murillo.
Esta vacuna es el primer componente de la Sputnik V (de dos dosis) y tiene una efectividad del 79.4%, con solo una dosis después del día 28 de su aplicación. Un porcentaje mayor que el 76% obtenido con la aplicación de dos dosis de la vacuna AstraZeneca y que la vacuna china Sinopharm que tiene una eficacia del 79%, con dos inyecciones.
Además, los estudios demuestran que esta vacuna tiene 70% de eficiencia frente a la variante de preocupación delta. Además, al ser una sola dosis esta vacuna podría aplicarse como vacuna de refuerzo de otras vacunas y entonces sería tan eficaz como la vacuna de dos componentes que tiene 91.6% de eficacia, aseguran el fabricante.
“Creemos que la Sputnik Light podría ser la principal vacuna dentro de un año, cuando muchas personas solo tengan que volver a vacunarse o hayan padecido covid y no necesiten la Sputnik V”, asegura el director ejecutivo del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF, por sus siglas en inglés), Kirill Dmitriev.
Aunque la Sputnik V fue la primera vacuna contra la covid-19, no ha conseguido la aprobación de parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS); en septiembre este organismo anunció que el proceso estaba detenido porque una de las fábricas no pasó la prueba de inspección, pero en la última semana anunciaron que ya se reanudó el procedimiento.
Sin embargo, al no estar aprobada esto ha detonado que varios países, que están pidiendo esquema de vacunación como requisito de entrada, no la incluyan en la lista, entre ellos Estados Unidos y algunos países de Europa.
Incluso, los nicaragüenses ya han encontrado limitaciones para participar en eventos públicos en países cercanos. Por ejemplo, Costa Rica anunció que solo las personas que tengan completo su esquema de vacunación con Pfizer, Johnson & Johnson, Moderna o AstraZeneca, podrán asistir el próximo año al concierto de la banda británica Coldplay.
Las vacunas cubanas pioneras
Por su parte, los nicaragüenses que tienen hijos adolescentes y niños se han mostrado temerosos de aplicar las vacunas cubanas Abdala y Soberana 02, que tampoco están aprobadas por la OMS.
Estas vacunas tienen un porcentaje alto de efectividad, según describen los fabricantes. La vacuna Abdala, que fue desarrollada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba, demostró una eficacia del 92%. Esta debe explicarse en tres dosis con una diferencia de 14 días.
Mientras, el Instituto de Vacunas Finlay (IFV), de Cuba, asegura que la combinación de dos dosis de Soberana 02 con una de refuerzo de Soberana Plus ha demostrado una eficacia del 91,2 %.
En el caso de los menores de edad, el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED) de Cuba, explica que estas vacunas son seguras para aplicarse en niños mayores de tres hasta los 18 años, con un esquema de dos dosis.
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Estas vacunas son las primeras en el mundo en administrarse en niños menores de cinco años. Pues, la vacuna Pfizer, que recién consiguió la autorización para aplicarse en mayores adolescentes, apenas está en proceso de aprobación para vacunar a los niños de entre 5 a 11 años.
Para adquisición de vacunas, Nicaragua dispone desde finales de abril de 100 millones de dólares, que entregó el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), y además de un fondo propio de 19.8 millones de dólares, que recién aprobó la Asamblea Nacional, controlada por el partido de Gobierno. Sin embargo, nueve meses después solo se conoce la adquisición de vacunas Sputnik V, Sputnik Light y de las vacunas cubanas: Abdala, Soberna 02 y Soberana Plus.
