7 de julio 2020
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La ausencia de información detallada respecto a edad, sexo y ubicación de las personas contagiadas de covid-19 en Nicaragua, no permite conocer el nivel de diseminación del virus en el país, advirtió este martes la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Lo único certero es que la nación se encuentra en la etapa de transmisión comunitaria, por lo que la población necesita incrementar sus medidas de protección y el Gobierno de Daniel Ortega debe incluir más información en los reportes semanales del Ministerio de Salud (Minsa).
El doctor Ciro Ugarte, director de Emergencias de la OPS, destacó que "es importante tener información detallada y es importante tener el resultado de las pruebas moleculares que identifican la presencia del virus, porque solo así podremos saber cual es el nivel de diseminación" del coronavirus SARS-COV2 en este país.
Según el doctor Ugarte, en la medida que la ciudadanía esté informada sobre la presencia del virus en sus localidades va a "tomar medidas adicionales" para evitar contagiarse. Es por esta razón que el funcionario de la OPS instó a las autoridades nacionales a difundir más información, porque "esa es la mejor medida que la gran mayoría de los países están adoptando para la protección a sus propios ciudadanos", dijo.
A pesar que el Gobierno de Nicaragua ha recibido insumos médicos y capacitación de la OPS para la realización de las pruebas de laboratorio, este país continúa sin informar el número de pruebas que ha realizado y procesado desde el laboratorio del Centro Nacional de Diagnóstico y Referencia (CNDR), ubicado en el Complejo Nacional de Salud “Conchita” Palacios.
El último reporte del Minsa, al siete de julio, dice que en Nicaragua habían 2846 casos confirmados de covid-19 y 91 muertos, mientras que el Observatorio Ciudadano elevó la cifra de contagios a 7402 y 2087 muertos por covid-19 en Nicaragua, incluyendo 133 fallecidos por neumonía en la semana del 25 de junio al primero de julio.
Las comunidades indígenas son prioridad
Cada martes, la OPS realiza una sesión informativa virtual en la que informa sobre el avance de la covid-19 en la región de las Américas. Este siete de julio la organización se refirió al incremento de la enfermedad en zonas rulares, por lo que urgió a los gobiernos de la región a que fortalezcan los servicios de salud y las capacidades de respuesta ante emergencias en zonas alejadas.
Asimismo, la OPS señaló que el "respeto a las creencias y la cultura de las comunidades indígenas" debe ser prioridad en el Plan Nacional de cada uno de los Estados. En estos casos "es necesario reorientar las respuestas para que se adapten a esa población... En epidemias anteriores hemos visto que hay un impacto demasiado grande en esas poblaciones en comparación con las poblaciones más urbanas donde hay servicios de salud disponibles", expresó el doctor Ugarte.
Para este funcionario de la OPS las medidas más importantes que deberían aplicarse en zonas indígenas y rurales son: "Diagnóstico temprano, acceso a servicios de salud, información adecuada para que la población pueda tomar las precauciones para evitar el contagio".
En Nicaragua las comunidades indígenas de la Costa Caribe se encuentran desprotegidas ante el avance de la pandemia de la covid-19, una de ellas es Karawala, principal núcleo poblacional de La Cruz de Río Grande, la pandemia ha provocado que la población continúe su petición de alimentos y kits de higiene ya que, tradicionalmente se dedican a la pesca y la agricultura, pero en esta comunidad se decretó autocuarentena desde el pasado 20 de mayo.
Haydeé Bautista, líder comunitaria de Karawala, expresó días atrás que la cuarentena provocó que muchas familias padezcan por falta de alimentos, peor aún si se considera que en la zona no existen personas que tengan empleos generados por el Gobierno y otras fuentes tradicionales.
Reaperturas graduales
Hace una semana, la organización afirmó que algunos países planean relajar las medidas de salud pública, pero advirtió que esas reaperturas deben hacerse de manera gradual basado en las condiciones locales y estar preparados para imponer nuevamente medidas preventivas si la situación epidemiológica cambia.
La directora de OPS, Carissa F. Etienne, advirtió que la reapertura no es simplemente suspender las restricciones de viaje, y las órdenes de aislamiento preventivo obligatorio, sino que exige implantar una serie de medidas de salud pública, que permita rastrear casos nuevos y fomentar la capacidad suficiente para detectar y controlar nuevos brotes.
También “debemos estar preparados para ajustar el curso rápidamente si la situación epidemiológica cambia. Si tiene la voluntad de relajar las medidas preventivas, debe tener el coraje de retirarse si aumentan las infecciones” , dijo la doctora Etienne.
Esto incluye amplio acceso a pruebas, de manera oportuna, a los casos sospechosos y sus contactos. “Necesitamos pruebas, pero también necesitamos los resultados de estas pruebas se notifiquen con rapidez para tener un panorama preciso de la situación”, agregó.
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