Monseñor Báez a los tiranos: “Se encaminan a la ruina, los que cargan a sus espaldas crímenes e injusticias”

El obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, dijo este domingo 21 de agosto que se encaminan a la ruina "los poderosos que cargan a sus espaldas crímenes e injusticias" en una emotiva homilía desde la parroquia Santa Agatha en Miami, donde fustigó la blasfemia, la fabricación de calumnias infames, mientras exigió la liberación de los presos políticos del régimen.

El pronunciamiento del obispo carmelita, exiliado desde 2019 por amenazas de muerte de fanáticos del partido de gobierno en Nicaragua, se conoce horas después que el Papa Francisco expresó su “dolor y preocupación” por lo que ocurre en el país, donde la Iglesia católica es objeto de persecución de parte del régimen de Daniel Ortega.

“No son cristianos los poderosos que se sirven de la ley para hacer actos ilegales, ni quienes llaman bien al mal y mal al bien. Se encaminan a la ruina los tiranos que cargan a sus espaldas", dijo el obispo.

El viernes 19 de agosto, la persecución del régimen a los religiosos se recrudeció, alcanzando un punto máximo cuando la Policía asaltó la Curia Episcopal de Matagalpa y secuestró al obispo Rolando Álvarez, una de las voces de mayor prestigio de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, a quien las autoridades investigan por supuestamente “organizar grupos violentos” e “incitar al odio”.

"Hay que pedir la libertad, porque son inocentes", exclama monseñor Báez

Incluso, al final de la misa, monseñor Báez expresó unas palabras concretas sobre el encarcelamiento de Monseñor Álvarez, sus colaboradores y lo demás sacerdotes de la Iglesia católica: "Quiero que sepan que estoy sufriendo mucho, y estoy rezando mucho ustedes, por Nicaragua y por nuestra Iglesia. Especialmente quiero saludar con cariño a nuestros hermanos de la Diócesis de Matagalpa y de Estelí,  que están siendo privados de la presencia física de su pastor", expresó.

"Sé que para ellos es un gran dolor. Quiero decirles a los nicaragüenses que no perdamos la esperanza, y pidamos para monseñor Rolando Álvarez, para los sacerdotes de Matagalpa y los otros que están encarcelados, los otros laicos y todos los presos políticos de nuestros país. Hay que pedir la libertad,  no hay que negociar con la persona, hay que pedir la libertad, porque son inocentes. Confiemos en el Dios de la vida y la libertad, que va escuchar nuestras oraciones. Estamos con ustedes hermanos de Nicaragua", añadió.

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Monseñor Báez analizó la lectura del evangelio de Lucas en que se narra el encuentro de Jesús con una persona rumbo a Jerusalén que le pregunta sobre la salvación. La respuesta es que solo lo logran entrando por la puerta estrecha que, en palabras de Báez, es una “puerta del amor, la justicia y la verdad”.

“No olviden, nadie es eterno, solo Dios”

“Quienes ejercen el poder, no se engañen: no serán felices ni alcanzarán la salvación siendo injustos y crueles. Entiendan que hacer sufrir a los demás les cierra la puerta que conduce a la vida. Y no olviden que nadie es eterno, solo Dios. ¡Esfuércense en entrar por la puerta estrecha!”, afirmó el obispo carmelita.

Un dispositivo policial mantiene a Álvarez recluido a la fuerza en su residencia en Managua. La vicepresidenta Rosario Murillo leyó ese 19 de agosto la nota de prensa de la Policía, cuyo jefe supremo es Ortega, en que alegaron que la decisión de recluir al religioso la tomaron para custodiar la “paz, seguridad y tranquilidad de las familias”.

El discurso de Murillo fue rechazado inmediatamente tanto a nivel nacional como internacional. Representantes de Conferencias Episcopales de más de ocho países del mundo condenaron la agresión y exigieron la libertad de Álvarez.

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También lo hizo el padre general de la orden de los Carmelitas Descalzos, Miguel Márquez Calle, quien denunció la captura violenta del obispo nicaragüense y pidió la liberación inmediata del mismo y el respeto de su dignidad.

Otra condena destacada fue la del arzobispo de Miami, Monseñor Thomas Wenski, quien concelebrará una misa este lunes 22 de agosto con el obispo Silvio Báez, en la que pedirán por "la Iglesia martirizada de Nicaragua".

Reflexión sobre el cristiano y la mentira

El jerarca católico añadió este domingo 21 de agosto que delante de Dios no es lo mismo ser íntegro, bondadoso y servicial que ser egoísta, injusto y corrupto. “A nivel social, son inútiles y blasfemos los discursos melosos que invocan a Dios y hablan de él, mientras se lanzan palabras de odio, se fabrican calumnias infames y se hace sufrir a los pueblos”, reflexionó.

Báez abogó también por mantener la esperanza—“no desesperar jamás”— y agregó que la puerta de la que habla Jesús “está abierta” también para los poderosos, a quienes sugiere “cambiar de vida”.

“Dejen que el evangelio de Jesús ilumine su conciencia, asuman la responsabilidad de sus delitos y hagan espacio al amor en su corazón. Si quieren vivir de verdad y salvarse, liberen a quienes tienen cautivos, dejen de creerse eternos y actúen pensando en el bienestar de todos, no solo acumulando riquezas y aumentando su poder. Luchen no por oprimir”, recalcó.