24 de noviembre 2022
AA
La renuncia de Sergio Murillo a la presidencia de la Cámara Minera de Nicaragua (Caminic), es un nuevo reto para una industria que se acerca a los mil millones de dólares en exportaciones, hecho que los puso en la diana de las sanciones del Gobierno estadounidense, junto con el de la energía.
El pasado 10 de enero, se conoció que Estados Unidos había sancionado al presidente de la Junta Directiva de la Empresa Nicaragüense de Minas (Eniminas), el general de división en retiro, Ramón Humberto Calderón Vindell, así como a otros cinco operadores del régimen que encabezan Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Seis semanas después, la respuesta de la dictadura fue nombrar al gerente general de Eniminas, Ruy López Delgado, como presidente de la empresa estatal… hasta que una nueva ronda de sanciones incluyó a López Delgado y a Eniminas misma. Dado que esta es solo una empresa más, y no el regulador del sector, el pasado 24 de octubre se incluyó en la lista de sancionados a la Dirección General de Minas, del Ministerio de Energía y Minas (MEM).
“El sector está bien convulso. En lo gremial, es muy poco lo que se puede hacer”, dijo a CONFIDENCIAL —bajo compromiso de mantener su nombre en reserva— un exdirectivo de una cámara adscrita al Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep).
Las renuncias en gremios empresariales
Murillo no es el primero que toma una decisión como esa. Lo que sucede es que quienes renuncian, lo hacen procurando hacer el menor ‘ruido’ posible, aunque no siempre lo logran.
A finales de octubre de 2021, la empresaria Lucy Valenti renunció a la presidencia de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), menos de una semana después que sus colegas Michael Healy y Álvaro Vargas, presidente y vicepresidente del Cosep, fueran secuestrados por la dictadura, y convertidos en dos presos políticos más.
Dos semanas después, también renunciaba el presidente de la Cámara de Industrias de Nicaragua (Cadin), Marcos Pierson, alegando que sus obligaciones profesionales requerían que viajara constantemente, por lo que ya no podía cumplir con sus compromisos gremiales.
La renuncia de Murillo, que comenzó a involucrarse en la gremialidad a principios de la década pasada, y estaba en su segundo período como presidente de Caminic (entre 2019 y 2021, y luego, de 2021 a 2023, cargo que debía entregar en febrero), sugiere que el entorno político en que operan estas empresas, está más enrarecido que el que envuelve a todas las demás.
A propósito de las sanciones del 24 de octubre, un profesional con experiencia en la industria minera nicaragüense, dijo que, después de la sorpresa inicial que afectó a los ejecutivos de las empresas del sector, consideraba muy razonable creer que algunos pudieran estar sopesando la conveniencia de buscar otros horizontes más seguros para llevar sus capitales.
Cotización bursátil sigue afectada
Este martes 22, se conoció que Condor Gold había contratado a una empresa inglesa para que le ayudara a buscar un comprador para su operación minera en Nicaragua, la que está concentrada fundamentalmente en la Mina La India, en León, así como un par de concesiones mineras en Siuna y Boaco.
Del mismo modo, un día después de que se conociera la ampliación de la orden ejecutiva 13851, La Gaceta del martes 25 de octubre publicó la decisión del MEM de aceptar la renuncia por parte de Calibre Mining Nicaragua, a tres concesiones que le habían sido adjudicadas, y la de Minerales Matuzalen, que renunció a otra concesión, sin que hubiera confirmación oficial sobre las razones para tales desistimientos.
El profesional mencionado antes, había advertido que “esto (las sanciones) puede inducir al cierre o retiro de algunas de esas empresas… pero es definitivo que algunas tratarán de irse. Este anuncio podría llevar a que ni siquiera puedan vender sus activos y tengan que dejarlos en abandono, pasando al control de ‘otros’, que ya deben estarse frotando las manos”, graficó.
Mientras continúan tratando de sortear posibles complicaciones surgidas desde la acera de la política, las empresas no pueden obviar el daño que sufren en el día a día bursátil. Luego del anuncio de este martes, el precio de las acciones de Condor Gold volvía a caer, tanto en Londres (donde su acción perdía el 11.8% de su valor), como en Vancouver, donde la pérdida ya es de 5.71% en dos días de transacciones.
